Al
ritmo de 'Feo, fuerte y formal', 'Cadillac Solitario', 'El
Ritmo del Garaje' y otros clásicos, Loquillo cerró
el sábado la novena edición del Festival
Cultura Inquieta, nueve
jornadas de creatividad y música de todos los estilos que han
atraído a cerca de 45.000 asistentes repartidos entre
el Espacio
Mercado y
el Polideportivo
de San Isidro de
Getafe.
El
segundo fin de semana de #inquieta18 había arrancado el jueves con
el impresionante show de Rosalía. Acompañada
por El Guincho, palmeros, coristas y un cuerpo de baile, la joven
cantaora catalana presentó sus nuevos temas combinando volantes,
zapateados y el cante flamenco al que ya nos tenía acostumbrados con
coreografías, un espectáculo de luces y nuevos ritmos urbanos. La
jornada la abrieron a golpe de guitarrazo stoner y actitud punk las
gallegas Bala,
seguidas de Carmen
Boza,
quien con gran entrega desveló el contenido de La
Caja Negra –título
de su nuevo disco– en formato eléctrico. El viernes, la
escena independiente nacional tomó las tablas con la frescura
de Texxcoco, la
ironía de Las
Odio,
el apabullante directo de León
Benavente y
un cuasi incendio final de la mano de Kitai.
Y como broche final, el Loco hizo las delicias de un público
eminentemente rockero que también bailó con Desvariados y Nat
Simons.
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