El Ayuntamiento de Getafe a través de la delegación de Educación e Infancia, recupera después de muchos años el programa de Educación de Calle, enmarcado dentro de los programas de Prevención y Control del Absentismo y Mejora de la Convivencia Escolar.
El objetivo es paliar algunas situaciones del alumnado en edad de enseñanza obligatoria, que se pueden incrementar ahora además con la asistencia semipresencial a las clases por la COVID-19, con el absentismo, dificultades en la gestión del tiempo, así como en rutinas y hábitos de estudio.
La concejala de Educación, Ángeles García, pone en valor “llegar a los chicos y chicas desde sus propios entornos y circunstancias, en una relación de igual a igual, donde se genera un clima de confianza y el educador puede conocer las inquietudes del menor y ayudarle lo máximo posible, algo especialmente interesante en la situación de pandemia que vivimos”.
El papel del educador de calle, complementa el de los técnicos municipales que trabajan en esta línea, y el que realizan los educadores de calle de la delegación de Bienestar Social, centrando su acción en el entorno de los centros educativos, preocupándose por los intereses de los chicos y chicas; ofreciéndoles otros recursos educativos; alternativas de ocio; ayudándoles a mantener unas rutinas de asistencia y trabajo en casa y mediando en posibles conflictos. Los educadores de calle también recogen información del propio barrio, como necesidades y oportunidades de realizar nuevos proyectos.
A lo largo de este mes de febrero se está presentando este programa a los centros educativos, donde los educadores también serán un referente para el alumnado, favoreciendo la creación de asociaciones de alumnos y alumnas y promoviendo otras actividades interesantes para ellos.
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