El 24 de septiembre, tuvieron lugar diversas concentraciones en contra de las medidas de confinamiento selectivas y del desmantelamiento de la Atención Primaria llevado a cabo por parte del gobierno de la Comunidad de Madrid. En una de ellas, cerca de la Asamblea de Madrid, se dieron unas brutales cargas policiales contra las y los vecinos de Vallecas que se manifestaban por la sanidad pública, que se saldaron con diversos heridos y tres detenidos.
A tenor de las imágenes recogidas y del testimonio de los manifestantes, las cargas fueron absolutamente injustificadas, además de desproporcionadas. Contrasta esta desproporción con la actitud que esa misma policía nacional mostró en las manifestaciones del barrio de Salamanca el pasado mes de mayo, de clara connivencia con los manifestantes, y convendría recordar tanto a los antidisturbios como a sus mandos que sus sueldos también salen de los impuestos de la clase trabajadora que se manifestaba pacíficamente en Vallecas, no solamente de los de los habitantes de la calle Núñez de Balboa.
Exigimos que el Delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, dé inmediatamente explicaciones acerca del por qué de la desproporción de las cargas policiales de Vallecas, así como que depure responsabilidades.
Si se piden policías en vez de personal sanitario para vigilar las zonas confinadas, es evidente que lo que se busca es aumentar la represión de la población trabajadora de los barrios confinados, doblemente castigada por esta pandemia, no solucionar el problema sanitario.
El gobierno de PSOE y Unidas Podemos no se puede esconder tras la “responsabilidad institucional” y la “cogobernanza” para evitar poner manos en el grave desaguisado que el gobierno de Ayuso y Aguado está provocando en Madrid y eludir así sus responsabilidades, porque al final, quien paga es la mayoría trabajadora.
