No podíamos imaginar que el comienzo del año 2013, viniera
cargado de tantas noticias de presuntas corrupciones. A los ya conocidos casos
Gürtel y Urdangarín, enero nos presenta las irregularidades de los sobres entregados
en mano del PP y una nueva imputación relacionada con la Casa Real.
Un auténtico
bombazo informativo es lo que hoy publica el País. Con el titular: Las cuentas secretas de Bárcenas. El medio de comunicación, informa a la sociedad española de la
recogida de donativos de empresas y posterior reparto entre las élites del
Partido Popular.
Si en un
primer momento cuando sale la noticia, se podía deducir que Mariano Rajoy y
Cospedal, estaban limpios, con la aportación de las anotaciones publicadas,
vemos que también ellos, recibieron la gratificación del exterorero. Incluso
llama la atención el apunte dedicado a la compra de corbatas para Rajoy y algún
traje.
El
estudio desglosado de las anotaciones revela que todos los secretarios
generales del PP, presuntamente extendieron la mano para recibir la dádiva
correspondiente. De lo cual, se puede deducir que la dirección del partido, miraba
para otro lado cuando Bárcenas acumulaba fortuna en Suiza.
Con
independencia de las repercusiones jurídicas que el caso pueda tener, hay una responsabilidad
política que no se puede saldar con el desmentido de lo publicado. En este caso,
no basta con negar lo que el extesorero tiene anotado en su contabilidad, hay que
demostrar a la sociedad que todo el dinero recibido por el ejercicio de la
actividad política ha sido declarado a la administración de Hacienda. Cuando
las empresas hacen pagos en especie a sus trabajadores, ese abono queda
reflejado en la posterior declaración. Por tanto, para que la imagen de los
aludidos quede limpia de sospecha tienen que hacer pública la declaración de
hacienda donde quede reflejado que todo el dinero recibido está declarado. SI LA SUMA DE LO ENTREGADO POR BÁRCENAS, NO COINCIDE CON EL IMPORTE DECLARADO, HAY DINERO NEGRO.
Si no se
hiciera y se envolvieran en declaraciones vacuas, los españoles tenemos que
llegar a la conclusión de que estamos gobernados por un Gobierno que sustenta
un partido político lleno de presuntos corruptos.
Caso
Comunidad de Madrid
Expertos
aseguran que la Comunidad de Madrid (PP) es el laboratorio de ideas donde el
Partido Popular experimenta la puesta en práctica de su ideario, para el posterior traslado al resto de España.
Pues
bien, ahora conocemos que el Gobierno que preside Ignacio González, cuando privatiza
la Sanidad, paga por su gestión a la empresa. Y, además, paga la nómina de los
trabajadores que antes trabajaban para la Sanidad Pública y que después de la
privatización trabajan en la empresa concesionaria. Es decir, de las arcas
públicas sale el dinero que no paga la empresa que gestiona la Sanidad. De esto,
se deduce mayor ganancia para la empresa y sus accionistas. Mientras los
madrileño/as padecemos recortes y más recortes en los servicios públicos ¿HASTA
CUÁNDO?