El conocido aeropuerto de las “personas”, es decir, el espacio dedicado al despegue y aterrizaje de aviones en la ciudad de Castellón, invierte 456.000 euros en la compra de hurones y halcones que despejen las pistas “inutilizadas” de aves y conejos.
Foto Cadena Ser.
Esto, en un país dónde las agencias de calificación cuestionan el control del gasto público de las Comunidades autónomas.
La familia Fabra, debe pensar que la Comunidad valenciana es propiedad suya y por tanto, gastan a todo trapo sin importarles lo que sucede al resto de la ciudadanía valenciana y por extensión a la española.
Este desastre administrativo me lleva a una reflexión que provoca alarma social. Estamos hablando del Partido Popular que gobierna en la Comunidad valenciana y del que Mariano Rajoy, se define su protector. Es más, todo parece indicar que en esa Comunidad tiene un buen granero de votos que le pueden ayudar a ganar las elecciones el 20-N.
Entonces, la connivencia despilfarradora de los populares al servicio de intereses particulares debe encender todos los indicativos que avisan que una victoria del Partido Popular a nivel nacional, nos puede llevar a gastar de manera selectiva muy particular. Practicando los recortes presupuestarios en servicios sociales como queda demostrado en la Comunidad valenciana.
A pesar del dispendio económico en aves y conejos especializados, nadie de la caverna mediática conservadora sea mofado de la decisión, ni critica el despilfarro económico en un aeropuerto que al día de hoy, lo único que tiene en servicio es un director que cobra más sueldo que el presidente de la Generalitat.
Un buen espejo que refleja la acción de un Gobierno con mayoría absoluta presidido por el Partido Popular.