Saber elegir

Mañana se despeja la incógnita: Estados Unidos serán progresistas o conservadores. Ayer, el diario El País, se preguntaba cómo sería el mundo después de George W. Bush. Además pronosticaba que el próximo presidente tiene una titánica tarea por delante.

Es muy importante recordar, el legado que Bush, deja a EE.UU. y por extensión al mundo entero: una inexplicable guerra inacabada, fomento del extremismo islámico, y una terrible crisis económica.
Este prodigioso currículum, es el que genera que le dispensen el título de: "PEOR PRESIDENTE DE LA HISTORIA DE LOS ESTADOS UNIDOS".

Por ello, es conveniente no olvidar que el que fuera presidente de España, José María Aznar, presume de ser amigo personal del "ínclito" Bush. También durante bastante tiempo sus satélites populares alardeaban de la amistad personal que le llevó a poner los pies en la mesa. En fin, Dios los cría y ellos se juntan.

Si el candidato Obama, ganase las elecciones, a pesar de la difícil herencia que tiene que gestionar, una nueva etapa se abre para el mundo.
Juan Jesús Aznárez, en el excelente reportaje, nos cuenta que el ganador de las encuestas, en su libro "La audacia de la esperanza" en el viaje que hace a Irak, acompañado de su asesor en política exterior, Mark Lippert, se reúnen con los mandos de las tropas desplegadas en el país árabe, y Lippert, le pregunta a un veterano oficial, qué debía hacer Estados Unidos para mejorar la situación en Irak. "Marcharnos", fue la respuesta.

Como estas fechas son tan importantes para España y para nuestro Gobierno, la afinidad de conceptos que se origina entre Barack Obama y José Luis Rodríguez Zapatero, producirá una relación diferente, que a buen seguro será beneficiosa para ambos Estados.

Queda demostrado que existen políticas diferentes y por tanto, consecuencias distintas para los habitantes del planeta tierra.