Según los datos que aportan el barómetro de julio
realizado por el CIS, los españoles, medio punto arriba o abajo, seguimos
pensando igual que en las pasadas elecciones del mes de junio.
Resaltemos que el grupo político más beneficiado es el
Partido Socialista Obrero Español. Ello, no impide que el Partido Popular
mantenga una diferencia de 10 puntos a su favor en la intención de voto.
Sin entrar en grandes disquisiciones, sí quiero destacar
que el candidato popular Mariano Rajoy, demuestra conocer bien el
comportamiento psicológico del resto de candidatos y sus organizaciones.
Si no fuera así, no se habría atrevido a decir no al Jefe
del Estado, cuando en diciembre de 2015, le propuso formar Gobierno. Decisión
arriesgada que le podría haber dejado fuera del Gobierno que preside en
funciones. Sin embargo, el desacuerdo de la izquierda y progresistas hizo que
hubiera que repetir las elecciones en el mes de junio.
El esfuerzo realizado por el candidato socialista cuando
el Rey le pide a Pedro Sánchez formar Gobierno, no alcanzó el objetivo deseado.
Mucho se ha dicho y escrito sobre la negativa de Podemos en la votación, y al
mismo tiempo, igualmente, hemos escuchado y leído los motivos que hubo para
ello.
Y, es precisamente ese conocimiento del perfil político
de los líderes de los partidos y su organización interna, el que hace que sin
prisa, mañana de nuevo Rajoy, inicie otra ronda de contactos para lograr ser
investido presidente.
Ante una tendencia inamovible del electorado, sólo quiero
incidir en un dato irrefutable: la suma del porcentaje de voto de PSOE y Unidos
Podemos, alcanza el 42,7%. El Partido Popular según el sondeo del CIS obtiene el
32,5% en intención del voto.