Dice mi amigo y profesor César Navarro que él, a sus más
de 80 años, no tiene ningún inconveniente en declararse Masón. Yo, con 62 me
siento totalmente libre para contar todo aquello que acontece a mí alrededor.
Por ello, lo que acabo de conocer de primera mano del protagonista
quiero difundirlo en este espacio, con la confianza de que si llega a
determinadas personas sepan valorar la importancia dignataria que tiene la
escena que voy a relatar.
Tenéis que comprender que por respeto a la fuente
informativa protagonista, omita los nombres de los personajes. Pero lo sucedido
fue así:
Lamentablemente para el Partido Socialista de Getafe,
recientemente hemos perdido a dos compañeros queridos en el Partido. En la
última defunción durante el duelo en el tanatorio, se encuentran dos compañeros
socialistas y entre ambos se entabla una conversación que finaliza el uno
invitando al otro a una reunión que el lunes siguiente se celebraría en un bar
de Perales del Río. Y, por lo tanto, estaba invitado a que asistiera al
encuentro que iban a tener alrededor de 20 compañeros/as.
El invitado, puntalmente acude a la cita al lugar y hora
convocado y mientras van llegando los asistentes entre los primeros en llegar, se
genera un cambio de impresiones sobre las posibilidades que tiene el PSOE de
recuperar la confianza de los electores.
Nuestro invitado expresa su certeza de que, “si vamos
todos juntos lo podemos conseguir”.
Finalmente, aparece el invitador y convocante del
encuentro y unos se sientan y otros todavía permanecen de pie. También hace
aparición en la escena otra persona que preside una Asociación de Vecinos.
Casualmente, éste último, hace una indicación a la persona convocante y se alejan del
espacio dispuesto para el encuentro. Algunas personas les siguen, y cuando
vuelven, el protagonista que durante el velatorio había insistido en la
invitación para que el afectado estuviera presente ese lunes, le dice: “mira
esto no es una reunión del Partido, es una reunión de una Asociación de Vecinos
y no puedes estar presente en el encuentro”.
No hay que insistir en que el veterano militante
conocedor de todos los entramados políticos, no acepta la explicación y
demostrando más ética que el invitador abandona el salón.
Hoy me lo cuenta y valoramos la dignidad política de un
veterano dirigente que a todas luces ha perdido el horizonte de la situación
política que se vive en Getafe. Como mi confidente dice que allí había varios
compañeros de traje, a ellos, quiero dar a conocer este proceder para que estén
bien informados de los compañeros del viaje promocional.
