El Partido de los líos internos

Las cosas en política no pasan por que sí. Que el celebérrimo Aznar, haya utilizado la plataforma mediática de Esperanza Aguirre, no es casualidad. Desde que dejó la política activa, no había ofrecido entrevistas televisivas a las cadenas españolas.

Ha tenido que celebrarse el XVI Congreso del PP, cuyo resultado, parece que no ha gustado a un importante sector del poder popular. La intervención que tuvo el conocido ex presidente, ya apuntaba la orientación que anoche en Telemadrid, desgranó. Si a esto, le sumamos que la presidenta Aguirre, se considera “el verso suelto del poema” se entiende que el valorado fuego apagado por Mariano Rajoy, tiene rescoldos incandescentes que reavivan el calor opositor interno.

Las declaraciones de Aznar, deben haber hecho huella en las personas que hoy están ocupando cargos de responsabilidad en el Partido Popular. Según su criterio no se debe renovar. Y él, se permite mantener que la alianza con los poderosos en la guerra de Irak, situó a España al lado de los que mandan en el mundo.
Hay que reconocer, que para el Partido Socialista, cuántas más intervenciones y declaraciones públicas haga, mejor. Como todo el mundo sabe que es el presidente de Honor, sus afirmaciones no son palabras baladíes de una persona trivial.

Si a esto, le sumamos los abucheos de Cataluña, la deserción de cargos en el País Vasco, los escándalos de los registros de despachos en la Comunidad de Madrid, la reposición de afectados por los escándalos urbanísticos y las luchas abiertas de concejales cómo las realizadas en la ciudad de Getafe; se puede afirmar que hoy, si el Partido Popular pone un circo, le crecen hasta los enanos; con perdón de los bajitos.

Y esto, no tiene visos de solución.