La Sra. Aguirre, propone que los alumnos cuyas familias se declaran objetoras para que sus hijos no reciban la formación contenida en la asignatura, que a cambio, hagan tareas de voluntariado o trabajos en el mismo Centro educativo. Esto, me parece un grandísimo dislate.
Estamos hablando de chicos y chicas menores, que se ven y se sienten diferentes en su Centro, debido a las consignas ideológicas de sus Padres. Máxime, cuando lo que se les imparte son realidades que les envuelven del mundo actual y que fuera de sus casas están obligados a convivir con ellas.
Es verdad, que la libertad de cátedra de los profesionales de la Enseñanza, les permite elegir libros diferentes. En eso, precisamente consiste la libertad. Lo que pueden y deben hacer los Padres, es debatir el contenido del libro y analizar si lo incluido en el temario, perjudica los valores y principios humanos.
Si no fuera así, repito, que por hacer oposición política al Gobierno socialista, no deben marcar como diferentes a sus hijos.
Cuando Esperanza, habla de trabajos de voluntariado ¿qué está diciendo? ¿Suplir funciones que están encomendadas a los mayores? Y mientras sus compañeros/as, aprenden asumiendo valores y principios, ¿ellos/as qué ejercitan?
El Gobierno conservador italiano, que preside Silvio Berlusconi, introduce en la Educación italiana la asignatura “Ciudadanía y Constitución”. Que nos es ni más ni menos que ayudar a los alumnos a ser ciudadanos conscientes de sus derechos y deberes. “Educación cívica”, por tanto, como “Educación para la Ciudadanía".
Éste, es un ejemplo afín ideológicamente, pero en el resto de Europa, el debate está superado. Por lo tanto, Esperanza Aguirre, debería acometer la solución de otros problemas.
Paradigma de ellos, es precisamente no haber conseguido la concertación social y laboral con los Sindicatos y Empresarios, que ayude a la aplicación de las mejores medidas económicas que tiene aprobadas el Gobierno de Zapatero y que en la medida de lo posible frene el crecimiento del paro en la Comunidad de Madrid.