La canallada que Manuel Lamela, antiguo Consejero de Sanidad, del Gobierno de Esperanza Aguirre, en la Comunidad de Madrid, le hizo al Hospital Severo Ochoa de Leganés, y por extensión a la Sanidad Pública madrileña, ha quedado demostrada en los tribunales de Justicia.
“Sedaciones irregulares con resultado de muerte” fueron las acusaciones falsas que el Consejero les propició a los responsables de la unidad de cuidados paliativos del Hospital. Hasta 400 muertes, se inventó para acusar al doctor Montes y su equipo.
La sentencia de la Audiencia Provincial, considera falsas todas las acusaciones.
Desde el primer momento, esto, olía mal. Y se percibía que tantas muertes de enfermos terminales que llegaban a las urgencias no eran posibles. Pero el Consejero Lamela, con la aquiescencia de la Presidenta Aguirre, consiguió sembrar las dudas entre los usuarios del malogrado Hospital.
Ahora, se recuerda las cantidad de personas que padeciendo una enfermedad terminal, habrán sufrido debido a la supresión de las ayudas sedantes. Los profesionales de la medicina, visto el acoso de la autoridad sanitaria de la CAM, contra el doctor Montes, evitaban sedar a los pacientes terminales.
El propio Mariano Rajoy, afirmó que conocía el carácter de Lamela, y no dudaba de su integridad. Ha resultado ser un farsante.
Partidos políticos, sindicatos, profesionales de la medicina, y organizaciones vecinales, siempre hemos creído en la inocencia y profesionalidad de los médicos acusados. Hemos sido muchas las personas, que hemos pedido públicamente que llegado el momento final, queríamos morir con serenidad y no sufrir. Que era la labor humanitaria que hacían estos médicos.
Ahora, debemos felicitarles por el lavado de imagen que impone la justicia. Deben ser restituidos en sus puestos de trabajo, y los responsables acusadores tienen que presentar su dimisión irrevocable.
Los madrileños debemos reflexionar sobre las consecuencias que una actuación planificada contra la Sanidad Pública, puede tener sobre el servició universal que tanto nos ha costado conseguir. Y debemos pensar qué partido político ha sido el generador de esta agresión.
El Partido Popular, ¡tiene que perder las elecciones en Madrid!
Los datos del último Pulsómetro antes de comenzar la campaña electoral, indican que el PSOE lograría hoy el 44% de los votos, frente al 38% del PP.
En la toma de la muestra, no se conocía la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid.
“Sedaciones irregulares con resultado de muerte” fueron las acusaciones falsas que el Consejero les propició a los responsables de la unidad de cuidados paliativos del Hospital. Hasta 400 muertes, se inventó para acusar al doctor Montes y su equipo.
La sentencia de la Audiencia Provincial, considera falsas todas las acusaciones.
Desde el primer momento, esto, olía mal. Y se percibía que tantas muertes de enfermos terminales que llegaban a las urgencias no eran posibles. Pero el Consejero Lamela, con la aquiescencia de la Presidenta Aguirre, consiguió sembrar las dudas entre los usuarios del malogrado Hospital.
Ahora, se recuerda las cantidad de personas que padeciendo una enfermedad terminal, habrán sufrido debido a la supresión de las ayudas sedantes. Los profesionales de la medicina, visto el acoso de la autoridad sanitaria de la CAM, contra el doctor Montes, evitaban sedar a los pacientes terminales.
El propio Mariano Rajoy, afirmó que conocía el carácter de Lamela, y no dudaba de su integridad. Ha resultado ser un farsante.
Partidos políticos, sindicatos, profesionales de la medicina, y organizaciones vecinales, siempre hemos creído en la inocencia y profesionalidad de los médicos acusados. Hemos sido muchas las personas, que hemos pedido públicamente que llegado el momento final, queríamos morir con serenidad y no sufrir. Que era la labor humanitaria que hacían estos médicos.
Ahora, debemos felicitarles por el lavado de imagen que impone la justicia. Deben ser restituidos en sus puestos de trabajo, y los responsables acusadores tienen que presentar su dimisión irrevocable.
Los madrileños debemos reflexionar sobre las consecuencias que una actuación planificada contra la Sanidad Pública, puede tener sobre el servició universal que tanto nos ha costado conseguir. Y debemos pensar qué partido político ha sido el generador de esta agresión.
El Partido Popular, ¡tiene que perder las elecciones en Madrid!
Los datos del último Pulsómetro antes de comenzar la campaña electoral, indican que el PSOE lograría hoy el 44% de los votos, frente al 38% del PP.
En la toma de la muestra, no se conocía la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid.