Este, es el auténtico problema que tiene España. ETA, es la única banda terrorista que queda en Europa. Y contra ellos, tenemos que actuar la sociedad civil con todas nuestras armas. La acción inmediata, tiene que ser la respuesta masiva en las urnas, aislando con nuestros votos a todos los cómplices políticos que no condenan los atentados terroristas.
La unidad de acción de los grupos políticos, tiene que ser contundente y verdadera. Dejando nula para siempre la posible rentabilidad política.
Por esto, no se puede entender que cuando todavía está el cuerpo caliente del ex concejal socialista, Esperanza Aguirre, (PP) presidenta de la Comunidad de Madrid, lance el mensaje de la autodeterminación de Euskadi y la pérdida de Navarra. Esta mujer, no tiene sensibilidad humana. Estaba enredada en jalear a los padres para que se hagan objetores de una asignatura de educación, como si eso, fuera lo que realmente nos preocupa a la sociedad.
Ante una situación así, sólo me queda unirme al dolor de la familia y reprochar con firmeza a los dirigentes políticos que tienen el comportamiento de la presidenta popular de la Comunidad de Madrid.
Con mucha tristeza, tenemos que ejercer el mayor de nuestro derecho.
¡VOTAR! ¡VOTAR! ¡VOTAR!