El día 3 de mayo, es el día elegido por la Asamblea General de Naciones Unidas para celebrar el `Día Mundial de la Libertad de Prensa´. Debemos
reconocer que sin plena Libertad de Prensa no hay Democracia de calidad.
Por ello, está justificada la respuesta contundente y unánime
de toda la sociedad organizada e institucional contra la pretendida sanción o
multa que el ministro de Justicia del Gobierno de España, Rafael Catalá, quiere
llevar a cabo contra los medios de comunicación que informen sobre los procesos
judiciales de los casos de corrupción y otras cuestiones que afectan directamente
a la sociedad española.
Con el pretexto de proteger `los casos bajo sumario´ quiere
impedir que el trabajo periodístico recopilando toda información de interés general,
que están tratando los tribunales de justicia, no vean la luz ante la opinión
pública. Es decir, la información es poder y por tanto, el Gobierno del PP
quiere mantener a toda costa la información.
Se puede entender que son tantos los casos relacionados
con cargos o excargos políticos del Partido Popular los que se están juzgando,
que el hecho de estar en un año electoral intenso, lleva al ministro a
pretender aprobar algo que dulcifique la información que generan.
La reacción en defensa de la Libertad de Prensa, es una
prueba de que la sociedad española estamos a favor de una `Democracia de
calidad´. Obviamente, esto lleva consigo la implantación de leyes y medidas que
impidan la posibilidad de delinquir a los cargos públicos. Es necesario también
que los afectados en casos de corrupción (corruptores y corrompidos) sean
juzgados con agilidad para que cumplan la condena en todos sus términos.
Es muy importante mantener una información abierta, veraz
y libre así lo manifiesta Naciones Unidas:
“El periodismo de calidad permite a los ciudadanos
adoptar decisiones sobre desarrollo de sus sociedades con conocimiento de
causa, y se esfuerza por sacar a la luz la injusticia, la corrupción y el abuso
de poder. Para ello, el periodismo debe tener la posibilidad de prosperar, en
un entorno propicio en el que los periodistas puedan trabajar con
independencia, sin interferencias indebidas y en condiciones de seguridad”.