A raíz de la primera decisión que toma el Gobierno de Rodríguez Zapatero, que no fue otra, que ordenar que el ejército español que estaba en la guerra de Irak, regresara a nuestro país; el Partido Popular, acusa al Gobierno, de romper las buenas relaciones que ellos, los populares, habían creado con el Gobierno de EE.UU.
Todavía tenemos en la retina aquella imagen de Aznar, con los pies en la mesa de George Bush, presidente americano. Y no sólo fue la foto sino que, el propio Aznar, se pavoneaba de haberlo hecho. Además argumentaba que España había entrado en una nueva órbita, rompiendo con su tradicional pasado. Yo diría, que fue entreguismo ante el poderoso como se viene demostrando cada día.
De los protagonistas “trío de las Azores”, ya sólo queda Bush, y todo indica que será sustituido dentro un año, por un/a gobernante del Partido Demócrata. Dentro del proceso de primarias que celebran los demócratas estadounidenses, la personalidad de Hillary Clinton, se perfila como futura presidenta de Estados Unidos.
Por ello, es muy interesante el encuentro que Bill Clinton, mantiene con el jefe del Estado y con el presidente del Gobierno.
El ex presidente, tras reunirse durante una hora y media con José Luis Rodríguez Zapatero, Clinton describió a España como un país modélico: La economía española, destacó, ha crecido al 3,8 por ciento en los últimos años y ha creado tres millones de puestos de trabajo, al tiempo que el país reducía un 4 por ciento la emisión de gases de efecto invernadero (cambio climático). Señaló, además, que el Gobierno destina el 0,5 por ciento de su PIB a cooperación al desarrollo -"no se ha quedado sólo en buenas intenciones"- y fomenta la educación en África y Latinoamérica. "Por eso me ilusiona" trabajar con el Gobierno que preside Rodríguez Zapatero, comentó.
Es decir, este Gobierno, está trabajando intensamente las futuras relaciones de España y Estados Unidos.