La Comunidad de Madrid estrenará el próximo mes de
septiembre, al inicio del curso escolar 2020/2021, la limitación del uso del
teléfono móvil en las aulas de los colegios e institutos. Se trata de una medida
encaminada a la mejora de los resultados académicos de los alumnos
madrileños, especialmente aquellos que tienen mayores problemas con el
estudio, y también está enfocada a luchar contra el ciberacoso y el bullying en
los centros docentes madrileños.
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy la modificación del Decreto por el que
se establece el marco regulador de la convivencia en los centros docentes de la
Comunidad de Madrid. Este cambio en la regulación incorpora la prohibición
expresa del uso de los teléfonos móviles y dispositivos electrónicos durante la
jornada escolar, permitiendo, exclusivamente, su uso como herramienta
didáctica o por razones de salud.
Esta medida, contemplada en la Estrategia integral para la Convivencia escolar
y en el Plan de Ciberseguridad del Ejecutivo regional, afectará a todos los
centros públicos y concertados –más de 1.700–, donde actualmente cursan sus
estudios más 800.000 alumnos.
La prohibición del uso de los teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos
establece un margen de autonomía de los centros para que, en su contexto y
dentro de las normas de convivencia aprobadas, puedan permitir el uso de estos
medios, de forma excepcional, en determinados períodos, o con fines didácticos,
así como a aquellos alumnos que por razones de necesidad o excepcionalidad
lo necesiten.