Entre los componentes que generan el problema económico está el elemento humano. Personas que dirigen las entidades financieras y que sabían y conocían que lo realizado no era ortodoxo y estaban provocando un riesgo de incalculables consecuencias. A esto, hay que sumarle la falta de control económico de los gobiernos donde la economía de mercado, es el motor de todo el proceso. Aunque ha quedado demostrado que el “mercado” por sí solo, no corrige la ambición y avaricia de sus componentes.
Después de las millonarias ayudas que los gobiernos están inyectando a las “entidades” para evitar su quiebra, son muchas las voces que piden que esto, no pueda ser más de lo mismo y aquí no ha pasado nada. Lo ocurrido es gravísimo y por lo tanto, hay que considerar que lo practicado hasta hoy, ya no sirve, y es necesario introducir correcciones severas de garantía.
Porque, a pesar de la aparente calma, es necesario generar credibilidad y confianza.
¡Esto se tiene que acabar! Después de comprobar que disponemos de medios de ayuda económica, ha llegado el momento de que la sociedad civil del mundo entero, exijamos a los gobiernos, a los poderes económicos la ayuda PARALELA que termine con el HAMBRE DEL MUNDO.
¡Hay que actuar inmediatamente! Todos los humanos del planeta tenemos que obligar a los poderosos a trabajar para conseguir hacer desaparecer el HAMBRE DEL MUNDO.
Cuando se logre, estaremos demostrando que se puede tener credibilidad y confianza en el sistema. Mientras tanto………