22/07/2014

La consolidación de la mentira

Mi deseo personal me lleva a manifestar el rechazo a lo que a continuación voy a referir. Viene a mi memoria el rescate de parte del sistema bancario realizado con dinero público y las correspondientes declaraciones de las autoridades económicas afirmando que lo invertido para salvar a determinadas entidades financieras, será devuelto al Estado.

Hoy, en la portada de `El País´ nos desayunamos con la noticia de que el Estado pierde 11.800 millones de euros, por la venta de una entidad intervenida y vendida al BBVA.
Al mismo tiempo y en el mismo lugar, el titular es: `el Gobierno negocia con las comunidades autónomas nuevos recortes para la ciudadanía española´.
Es decir, recupera a Catalunya Banc con la aportación 13.800 millones, la vende por 1.187 millones de euros, y para cuadrar las cuantiosas pérdidas negocia nuevo recortes con la Comunidades.

Sorprende la nueva estrategia empleada convocando al aporte de soluciones a las comunidades autónomas. A la cual, los gobiernos autonómicos han respondido aportando soluciones que a su manera de entender pueden ayudar a consolidar el control del déficit público.

Así, entre las 255 iniciativas que han sumado las aportaciones realizadas, nos encontramos con:
-      Sanidad, vamos a tener que pagar por varios conceptos que hoy no hacemos. Copago por la falta de asistencia a las citas concertadas. Copago por asistencia a la consulta médica y urgencias.
-     Educación, incremento del ratio de profesores por alumno en un 10%. Despido de docentes interinos durante el periodo no lectivo del verano. Ajustes en las partidas de becas de comedor.
-        Justicia, reducción del módulo del turno de oficio.

A estas pretendidas medidas se han de sumar a las ya establecidas por el Gobierno de Mariano Rajoy:
-        Congelación del los sueldos de los funcionarios.
-        Aumento de la jornada laboral de los funcionarios.
-        Reducción de un 20% de las subvenciones a los partidos políticos.
-        Recorte de 9.000 millones en el presupuesto de los ministerios.
-        Paralizar el calendario de la aplicación de la Ley de Dependencia.
-        Supresión de la renta básica de emancipación.
-        Subida del impuesto del IRPF.
-        Subida del IBI a los inmuebles.
-        Aumento del copago farmacéutico. Incluidos los pensionistas.
-        Retirada de la tarjeta sanitaria a los inmigrantes sin papales.
-        Aumentar la ratio de alumnos en las clases despidiendo a los profesores interinos.
-        Subida de tasas universitarias para el próximo curso.
-        Subida de tasas judiciales.
      -        417 medicamentos dejan de estar subvencionados.

Es decir, si la sociedad española no conseguimos paralizar la puesta en práctica de estas ideas y medidas que aconsejan los gobiernos de las comunidades autónomas nos veremos abocados a padecer una pérdida extraordinaria de los servicios públicos que hoy tenemos reconocidos.

Por ello, de manera especial dentro del Congreso Extraordinario del Partido Socialista Obrero Español, se tiene que hacer pública una resolución oponiéndose de manera tajante a la puesta en marcha de esas medidas aportadas.  

5 comentarios:

el moli de getafe dijo...

Que fue lo que le dijo el que provocó el socavón al que se puso a tapar el agujero.

Anónimo dijo...

Siempre los otros son los malos.Te suena Narsi Serra, era el president, Moltó 7.ooo de agujero, te suena? ccm, Banco de España de la época,cnmv.....y la lista de zparo es inmensa, pensionazo, rebaja del 7% del sueldo de los funcionarios, congelación de las pensiones ....... pero en su interior no quería hacer recortes.Que conste que el mismo asco me da los sociolistos que los peperos pero a ti no te da igual viva la imparcialidad.Siempre con la misma cantinela, los otros son los malos, con lo que tu sabes de los tuyos y no publicas res

F. dijo...

Sorprende el gazpacho de mezcla de noticias, mezclando la venta de Catalunya Banc con los recortes.
Empezando por el final, estoy absolutamente de acuerdo en aspirar a recuperar lo que nunca debimos perder. Ninguna persona sensata estaría de acuerdo con los recortes aunque tampoco ninguna persona sensata pensaría que se pueden mantener sin tener con qué pagarlos. Es decir, sin generar riqueza.
Y no sólo me quedo con los beneficios sociales que hemos perdido sino también en los muchos que nos quedan por conquistar. Como ejemplo, fiscalmente, ¿dejará algún día de considerarse la vivienda habitual como inversión? Como si te pudieras desprender de tu vivienda habitual y monetizarla en el momento que quisieras. ¿Por qué un pensionista tiene descuentos adicionales y un parado sin prestación no? Como ejemplo, deberíamos preguntar cuántos parados no pueden reciclarse en cursos de formación que no están en Getafe porque no pueden asumir el coste del transporte público. Y podíamos seguir.
Pero en lo referente a Catalunya Banc, me parece una entrada demagógica. Podríamos discutir si el precio es el adecuado o no, inclusive si es lícito –legítimo más bien- que una entidad en esas condiciones mantenga a sus consejeros con sueldos de 735.000 euros anuales.
Pero que alguien levante la mano si tiene una idea diferente. ¿Se podía haber dejado caer y liquidar la entidad? Pues sí. Y si fuera un banco de inversiones, y así tendríamos nuestro Lehman Brothers en pequeñito, hasta podríamos estudiarlo si bien el tiempo ha demostrado que dejar quebrar aquel banco no fue la mejor decisión. Pero esto es otra historia. Esto es un banco con 5.300 empleados y 3,6 millones de clientes, que tienen depósitos por valor de 40.000 millones y que tienen préstamos por valor de 36.000 millones. Con 800 millones en cartillas de ahorro y 8.400 millones en cuentas corrientes. ¿Cómo les decimos a los que tienen las cuentas de ahorro y cuentas corrientes que su dinero no lo pueden recuperar? ¿Cómo les decimos a los que tienen sus ahorros en depósitos que han perdido su dinero? ¿Les decimos a los hipotecados que a partir de ahora sus hipotecas se han vendido a un fondo de Miami o parecido? ¿Les contamos a los titulares de los planes de pensiones que, mira tú que pena, pero que han perdido todo y que busquen debajo del colchón para su jubilación? ¿Enviamos a los 5.300 empleados que quedan, que ya han pasado por un ERE, a su casa a hablar con el fondo de garantía y después de la liquidación ya veremos? Los únicos que se salvarían serían, probablemente, los titulares de fondos de inversión pues, al fin y al cabo, esos fondos no pertenecen al banco.
Y algunos me dirán que los depósitos están protegidos con hasta 100.000 euros pero, ¿han leído la letra pequeña? Por simplificar, la protección no es en metálico. Te darían un bono de deuda soberana o algo parecido y luego tú negocia en el mercado secundario. Es mejor que nada pero que nadie piense que estamos cubiertos por una gran manta que nos calentará cuando haga frío. Y en este caso, además, habría costado más de 100.000 millones al estado español. Pues ya puestos, mejor perder los 11.800 millones.
¿O es esto lo que habría hecho con el banco?

ANTONIO LOPEZ MEGIA dijo...

Asi es y así lo estamos viendo, la realidad se impone,la calle sigue viendo por indicación interesada y sibilina que la culpa es de Zapaiero. Pueden seguir mintiendo impunemente, pueden seguir robando con total impunidad, pueden seguir meando contra el viento en su planificación contra el desastre, tienen un cómodo colchon ideológico-masoquista de apoyo incondicional a sus desmanes.La sociedad española será más pobre y miserable, pero será feliz con sus dirigentes(Por mayoría)y con sus amos ricos, cada vez más ricos.!Hasta cuando aguantará el cuerpo social esta desmesura!(Por mayoría, claro)y por favor ya está bien de Zapatero.

Antonio Pulido Ruiz dijo...

Es evidente que todo lo relacionado con la banca y una supuesta quiebra es es complicado de conciliar para que no afecte a los depositarios.

Ahora bien, una vez que se toma la decisión política de recuperar a las entidades con dinero público, no se puede aceptar que el final de la operación sea la privatización de la entidad para que otra se aproveche del esfuerzo realizado con el dinero de todos.

Ante esta situación se podía mirar la posibilidad de quedarse el Estado con ella, y convertirla en un banco público que tan necesario es para reactivar la economía.